martes, 29 de diciembre de 2009

Queda prohibido...

Queda prohibido llorar sin aprender,
levantarte un día sin saber que hacer,
tener miedo a tus recuerdos.

Queda prohibido no sonreír a los problemas,
no luchar por lo que quieres,
abandonarlo todo por miedo,
no convertir en realidad tus sueños.

Queda prohibido no demostrar tu amor,
hacer que alguien pague tus deudas y el mal humor.

Queda prohibido dejar a tus amigos,
no intentar comprender lo que vivieron juntos,
llamarles solo cuando los necesitas.

Queda prohibido no ser tú ante la gente,
fingir ante las personas que no te importan,
hacerte el gracioso con tal de que te recuerden,
olvidar a toda la gente que te quiere.


Queda prohibido no hacer las cosas por ti mismo,
tener miedo a la vida y a sus compromisos,
no vivir cada día como si fuera un ultimo suspiro.


Queda prohibido echar a alguien de menos sin alegrarte,
olvidar sus ojos, su risa,
todo porque sus caminos han dejado de abrazarse,
olvidar su pasado y pagarlo con su presente.

Queda prohibido no intentar comprender a las personas,
pensar que sus vidas valen mas que la tuya,
no saber que cada uno tiene su camino y su dicha.


Queda prohibido no crear tu historia,
no tener un momento para la gente que te necesita,
no comprender que lo que la vida te da, también te lo quita.


Queda prohibido no buscar tu felicidad,
no vivir tu vida con una actitud positiva,
no pensar en que podemos ser mejores,
no sentir que sin ti este mundo no sería igual.





Desde el momento en que leí este poema de Alfredo Cuervo Barrero -aunque muchos se lo atribuyen a Pablo Neruda- me impresionó. Es tan profundo, tan positivo, tan optimista... que voy a colgarlos en la puerta de mi habitación para recordarlos cada día y convertir esto en mi filosofía de vida :).



Espero que estéis pasando todos unas felices fiestas junto a los vuestros, y que el gordito se haya portado bien con vosotros.

domingo, 20 de diciembre de 2009

Moldes...

Como los pasteles o las galletas, las personas también estamos hechas con moldes. Existen diferentes formas, pero todas ellas cumplen las mismas características:
- personaje que tira por la lengua sapos (falso, doble personalidad, critica a las espaldas)

- personaje quedabién (su carisma le hace llevarse a la gente a su terreno, pero resulta que para conseguirlo se contradice en sus argumentos e intenta quedar bien con todo el mundo; al final se le ve el plumero y nunca lo consigue)

- personajillo (débil, diferente a la mayoría, independiente)

- personaje jefe (líder por imposición, duro, estricto, serio)

- personaje pasota (independiente, va con unos y con otros, egoísta)
- personaje carismático (líder por naturaleza, bonachón, humano. Escasean estos moldes)

- personaje mágico (en un principio parece no encajar en ningún otro molde porque "no es como los demás", pero al final, después de la idolatración inconsciente, lo ubicamos perfectamente en cualquiera)




No me gusta estereotipar a la gente, ni mucho menos generalizar pero es que sucede una y otra vez, una y otra vez... De veras que yo pensaba que esto no era así, que cada cual es como es; pero no, me ha decepcionado bastante darme cuenta. Vaya donde vaya siempre me topo con alguien que encaja perfectamente en uno de estos moldes, al principio no lo aparenta pero son gestos, manera de hablar, de mirar, de ACTUAR. Sé muy bien cómo reaccionar frente a cada uno de ellos, de algo me ha servido la experiencia...









¿Y yo de qué molde estaré hecha?

jueves, 10 de diciembre de 2009

Buscando en el baúl de los recuerdos...

Querido amigo:



Estoy aquí todavía, asentando las ideas (aún a día de hoy no me he levantado). Entiendo completamente tu posición (esto ya no...), y he pensado que yo tampoco tengo prisa, no me importa ir despacio, es más lo prefiero... (creo que fue la mejor decisión que tomé) Voy a disfrutar de cada momento, cada instante a tu lado (y así fue...). No quiero dar pasos en balde, tenemos q estar seguros en todo momento de lo que hacemos y ya el tiempo lo dirá (y TE lo dijo, a mí no me dijo nada). Así que como a mí no me gusta que me roben el tiempo, he supuesto que a ti tampoco; por eso yo te lo regalo, todo el que necesites (di tanto por tan poco...).



Sé que es posible que, después de todo, esto no nos lleve a ningún sitio, que simplemente estés confundido o falto de cariño... (¡qué sabia soy! me pregunto por qué sabiendo lo que pasaría seguí apostando ciegamente por algo que nunca hubo. Tonta enamoradiza) No sé, ya es muy tarde para pensar (son las 2.25) (nunca es tarde). Independientemene, espero que finalmente los dos encontremos lo que esperamos en el otro y que los finales felices existan (definitivamente, NO EXISTEN. No en mi cuento. No por ahora). Pero pase lo que pase, la amistad es algo que siempre quedará, no lo olvides (ja! nisiquiera eso... no me dejaste ni ser tu amiga no sé muy bien por qué. No te conozco y no lo soporto). Ya solo con eso he ganado :)



Gracias a ti por hacerme ser quien soy cuando estoy contigo (Gracias por hacerme ser quien era mientras estABA contigo). Un abrazo enorme y un beso petardo! (lo mismo digo...)



Fdo. Latontaenamoradizaquesecreyóunagranmentira (esa soy yo)




PD: No te preocupes por mí que ya bastante tienes con lo tuyo (sí, eso, ya tienes bastante con "lo tuyo" como para siquiera cruzar dos palabras conmigo). No quiero que te ralles pensando "a ver, esto le va a molestar, esto otro igual lo malinterpreta, blablabla". Haz lo que te apetezca, cuando te apetezca (tenías que haber seguido leyendo hasta el final...) que si me molesta o lo que sea ya me encargaré yo de decirtelo, hay confianza (eso creía yo... pero de repente esa palabra desapareció de tu vocabulario. ¿Qué te pasó?). Y lo mismo por mi parte, si hago cualquier cosa que no te sienta del todo bien o no te parece adecuada, dilo en el momento sin miedos. (¿Ves, a que no llegaste a este punto? Tuviste que ser sincero desde un principio, ¿tanto miedo doy? ¡Qué mal lo hiciste joder! ¿Por qué, por qué, por qué? ¿Sabes que rectificar es de sabios? ¿Sabes que antes fuimos amigos? ¿Sabes que podemos seguir siéndolo? ¿Sabes que cuando me despierto eres el primero en quien pienso y que cada día tengo la esperanza de que des señales de vida, de que me vuelvas a admitir en la tuya? ¿Sabes cuánto te echo de menos...? Las largas conversaciones, las bromas, las risas, las confidencias, los consejos, tu mirada y tu sonrisa. No, no lo sabes, ni siquira te lo imaginas porque no tienes tiempo para eso. ¿Y yo por qué sigo siendo tan idiota? Escribir a nadie es de locos, pero escribir a alguien sabiendo que nunca lo leerá y que, si acaso lo hiciese, nunca me enteraré, es de más que locos... Espero sinceramente que todo esté genial y que tu decisión fuese la acertada, de verdad que me alegro por ti, pero me hubiese gustado que las cosas no terminasen así. Yo, mientras tanto, debería buscarme algún hobby que mantuviese mi mente ocupada 25 horas al día y evitar tener esas ralladas).










...Ya no te conozco,
y no lo soporto*

martes, 8 de diciembre de 2009

He caído en la rutina

Empieza esto ya a aburrirme y agobiarme un poco: despertar, autobús, clases, comer rápido, autobús, apuntes, coche, alumno, más apuntes, cenar, dormir y vuelta a empezar. Caras siempre conocidas, conversaciones similares cada día, rutina, rutina, rutina. ¡Puaj!
Necesito que mi vida de un vuelco, pero no de esos radicales a los que me tiene acostumbrada... no quiero de pronto sentirme como nueva, perfecta, contenta y feliz para al cabo de unos días recibir la patadita que me mande de golpe y porrazo a mi antigua realidad. No quiero eso. Solo algo sencillo que altere mi rutina, esas pequeñas cosas insignificantes a las que tanta importancia doy a veces, y tan poca otras...

lunes, 23 de noviembre de 2009

Desconocidos

...entonces ella tomó asiento y le vio. Estuvo observándole durante unos minutos: tenía el pelo hábilmente despeinado y sostenía entre las manos un libro aparentemente interesante, pues no despegaba la atención del mismdo. Pronto sus miradas se cruzaron y rápidamente él volvió a su lectura, pero este chico tenía algo que le impedía, a ella, apartar su ojos de él.

- ¿Nos conocemos? - preguntó al fin él, que ya empezaba a incomodarle esa mirada penetrante

- No, pero deberíamos... - contestó ella con una sonrisa pícara que delataba sus intenciones

lunes, 16 de noviembre de 2009

¡Soy la reina del mundo!

"¡Aaaaaaaaaaaaaaaaaaa!
¡Cómo molaaaaa!
¡Soy la reina del mundooooooooooo!
¡Mamá, a la próxima te vienes!
¡Yujuuuuuuuuuuuuu!
¿Cuándo repetimos?"
.
.
.
Sin palabras, una experiencia genial.
¡Para repetir!

viernes, 13 de noviembre de 2009

Inyección de adrenalina...

Mañana, por fin, me lanzo al vacío,
literalmente :)

martes, 10 de noviembre de 2009

Solo es un infierno sostenido...

Éramos distintos imposibles,
de un futuro menos claro,
entender bien lo que dices
me hace sentirme tan raro,
empieza todo a hacerse triste,
a quedar del otro lado,
tú tambien lo prometiste,
fuimos dos equivocados,
equivocados…

Y ahora este sitio está lleno
de noches sin arte,
de abrazos vacíos,
de mundos aparte,
de hielo en los ojos,
de miedo a encontrarse,
de huecos, de rotos,
de ganas de odiarse.

Y ya lo llevo sintiendo,
me quedo sin aire,
el cielo ha caído,
se muere, se parte,
sólo es un infierno sostenido,
sólo es un esfuerzo relativo.

Yo no pido casi nada,
que se pierdan mis sentidos,
que se nuble tu mirada.
Pero el miedo nos consigue,
se hace grande en estas manos,
mal recuerdo nos persigue,
fuimos dos equivocados,
equivocados…

Me voy, me voy, porque este sitio está lleno
de noches sin arte,
de abrazos vacíos,

de mundos aparte,
de hielo en los ojos,
de miedo a encontrarse,
de huecos, de rotos,
de ganas de odiarse.

Y ya lo llevo sintiendo,
me quedo sin aire,
la estrella ha caído,
se muere, se parte,
sólo es un infierno sostenido,
por el miedo a equivocarnos.

Porque este sitio está lleno
de noches sin arte,
de abrazos vacíos,
de hielo en los ojos,
de mundos aparte,
de cielos caídos,
y ya lo llevo sintiendo,
me quedo sin aire,
sólo es un infierno sostenido,
por el miedo a equivocarnos.

No quiero escucharte, no insistas,
prefiero esta vez encontrarte
inundando mis ojos,
esperando a que pase,
a que caigamos otra vez
y sólo digo que…
nunca quise hacerte daño
pero todo se nos fue
y aunque ahora somos como extraños,
yo jamás te olvidaré.

De noches sin arte,
de abrazos vacíos
de mundos aparte,
de hielo en los ojos,
de miedo a encontrarse,
de huecos, de rotos,
de ganas de odiarse,
sólo digo que nunca quise hacerte daño,
sólo es un infierno sostenido
por el miedo a equivocarnos,
por el miedo a equivocarnos.

Yo sólo digo que…
nunca quise hacerte daño,
que sólo es un infierno sostenido
por el miedo a equivocarnos.


Cada día me pregunto qué hice tan mal...


miércoles, 4 de noviembre de 2009

Caminando...

He estado desaparecida estos días, no tengo tiempo material. Sí, ha de notarse que formo parte de esa sociedad occidental de la que hablaba aquel tuareg de mi última entrada, en la que tenemos reloj pero carecemos de tiempo. De un sitio a otro sin parar, con prisas porque llego tarde, con cientos de cosas por hacer. Pero bueno, estoy ilusionada con un nuevo proyecto en mi vida: terminar la carrera en otra ciudad, no muy lejos, pero en otro ambiente.


¿Oviedo?














¿Barcelona?

¿Palma de Mallorca?










Todo se verá... Mientras tanto aquí sigo, caminando en ocasiones, corriendo en otras, pero siempre buscando un punto donde saltar y preparada para volar muy alto.

miércoles, 21 de octubre de 2009

Tenemos reloj, pero no tenemos tiempo...

Hoy me han mandado un mail que me ha conmovido, me ha hecho reflexionar y sí, realmente no tenemos nada aunque tengamos de todo... Aquí os la dejo, creo que merece la pena invertir parte de vuestro tiempo en leerla y saborearla.



Entrevista realizada por VÍCTOR-M. AMELA a MOUSSA AG ASSARID:


No sé mi edad: nací en el desierto del Sahara, sin papeles...Nací en un campamento nómada tuareg entre Tombuctú y Gao, al norte de Mali. He sido pastor de los camellos, cabras, corderos y vacas de mi padre. Hoy estudio Gestión en la Universidad Montpellier. Estoy soltero. Defiendo a los pastores tuareg. Soy musulmán, sin fanatismo.

- ¡Qué turbante tan hermoso...!
- Es una fina tela de algodón: permite tapar la cara en el desierto cuando se levanta arena, y a la vez seguir viendo y respirando a su través.
- Es de un azul bellísimo...
- A los tuareg nos llamaban los hombres azules por esto: la tela destiñe algo y nuestra piel toma tintes azulados...
- ¿Cómo elaboran ese intenso azul añil?
- Con una planta llamada índigo, mezclada con otros pigmentos naturales. El azul, para los tuareg, es el color del mundo.
- ¿Por qué?
- Es el color dominante: el del cielo, el techo de nuestra casa.
- ¿Quiénes son los tuareg?
- Tuareg significa "abandonados", porque somos un viejo pueblo nómada del desierto, solitario, orgulloso: "Señores del Desierto", nos llaman. Nuestra etnia es la amazigh (bereber), y nuestro alfabeto, el tifinagh.
- ¿Cuántos son?
- Unos tres millones, y la mayoría todavía nómadas. Pero la población decrece... "¡Hace falta que un pueblo desaparezca para que sepamos que existía!", denunciaba una vez un sabio: yo lucho por preservar este pueblo.
- ¿A qué se dedican?
- Pastoreamos rebaños de camellos, cabras, corderos, vacas y asnos en un reino de infinito y de silencio...
- ¿De verdad tan silencioso es el desierto?
- Si estás a solas en aquel silencio, oyes el latido de tu propio corazón. No hay mejor lugar para hallarse a uno mismo.
- ¿Qué recuerdos de su niñez en el desierto conserva con mayor nitidez?
- Me despierto con el sol. Ahí están las cabras de mi padre. Ellas nos dan leche y carne, nosotros las llevamos a donde hay agua y hierba... Así hizo mi bisabuelo, y mi abuelo, y mi padre... Y yo. ¡No había otra cosa en el mundo más que eso, y yo era muy feliz en él!
- ¿Sí? No parece muy estimulante. ..
- Mucho. A los siete años ya te dejan alejarte del campamento, para lo que te enseñan las cosas importantes: a olisquear el aire, escuchar, aguzar la vista, orientarte por el sol y las estrellas... Y a dejarte llevar por el camello, si te pierdes: te llevará a donde hay agua.
- Saber eso es valioso, sin duda...
- Allí todo es simple y profundo. Hay muy pocas cosas, ¡y cada una tiene enorme valor!
- Entonces este mundo y aquél son muy diferentes, ¿no?
- Allí, cada pequeña cosa proporciona felicidad. Cada roce es valioso. ¡Sentimos una enorme alegría por el simple hecho de tocarnos, de estar juntos! Allí nadie sueña con llegar a ser, ¡porque cada uno ya es!
- ¿Qué es lo que más le chocó en su primer viaje a Europa?
- Vi correr a la gente por el aeropuerto.. . ¡En el desierto sólo se corre si viene una tormenta de arena! Me asusté, claro...
- Sólo iban a buscar las maletas, ja, ja...
- Sí, era eso. También vi carteles de chicas desnudas: ¿por qué esa falta de respeto hacia la mujer?, me pregunté.... Después, en el hotel Ibis, vi el primer grifo de mi vida: vi correr el agua... y sentí ganas de llorar.
- Qué abundancia, qué derroche, ¿no?
- ¡Todos los días de mi vida habían consistido en buscar agua! Cuando veo las fuentes de adorno aquí y allá, aún sigo sintiendo dentro un dolor tan inmenso...
- ¿Tanto como eso?
- Sí. A principios de los 90 hubo una gran sequía, murieron los animales, caímos enfermos.... Yo tendría unos doce años, y mi madre murió... ¡Ella lo era todo para mí! Me contaba historias y me enseñó a contarlas bien. Me enseñó a ser yo mismo.
- ¿Qué pasó con su familia?- Convencí a mi padre de que me dejase ir a la escuela. Casi cada día yo caminaba quince kilómetros.. Hasta que el maestro me dejó una cama para dormir, y una señora me daba de comer al pasar ante su casa... Entendí: mi madre estaba ayudándome...
- ¿De dónde salió esa pasión por la escuela?
- De que un par de años antes había pasado por el campamento el rally París-Dakar, y a una periodista se le cayó un libro de la mochila. Lo recogí y se lo di. Me lo regaló y me habló de aquel libro: El Principito. Y yo me prometí que un día sería capaz de leerlo...
- Y lo logró.
- Sí. Y así fue como logré una beca para estudiar en Francia.
- ¡Un tuareg en la universidad. ..!
- Ah, lo que más añoro aquí es la leche de camella... Y el fuego de leña. Y caminar descalzo sobre la arena cálida. Y las estrellas: allí las miramos cada noche, y cada estrella es distinta de otra, como es distinta cada cabra... Aquí, por la noche, miráis la tele.
- Sí... ¿Qué es lo que peor le parece de aquí?
- Tenéis de todo, pero no os basta. Os quejáis. ¡En Francia se pasan la vida quejándose! Os encadenáis de por vida a un banco, y hay ansia de poseer, frenesí, prisa... En el desierto no hay atascos, ¿y sabe por qué? ¡Porque allí nadie quiere adelantar a nadie!
- Reláteme un momento de felicidad intensa en su lejano desierto.
- Es cada día, dos horas antes de la puesta del sol: baja el calor, y el frío no ha llegado, y hombres y animales regresan lentamente al campamento y sus perfiles se recortan en un cielo rosa, azul, rojo, amarillo, verde...
- Fascinante, desde luego...
- Es un momento mágico... Entramos todos en la tienda y hervimos té. Sentados, en silencio, escuchamos el hervor... La calma nos invade a todos: los latidos del corazón se acompasan al pot-pot del hervor...
- Qué paz...
- Aquí tenéis reloj, allí tenemos tiempo.

...Hoy han despedido a mi madre, ¿pero y qué? Ya se anunciaba el recorte de empresa hasta en los periódicos pero nunca piensas que te va a tocar a ti. De todos modos, se lo ha tomado bien, como unas vacaciones. Ya le toca dedicarse un tiempo para ella, no para el trabajo. Eso no es vida, ¡ahora toca vivir libre, como un tuareg mamá! :)

sábado, 10 de octubre de 2009

Inventando el tiempo

Quiero escapar a un pueblecito perdido en medio de la nada con pocos habitantes, montaña, playa, silencio, frescor... un lugar donde (re)inventar el tiempo y empezar de cero. Olvidar(me) de todo y de todos para dedicarme solo a mí.

Los buenos momentos hay que inventarlos, porque los malos llegan solos

...Estoy en ello, solo me queda encontrar el sitio perfecto *

lunes, 5 de octubre de 2009

Vivimos en un continuo examen

Todo el mundo ha tenido alguna vez en su vida un examen, es más, todo el mundo ha tenido a lo largo de su vida una retahíla de exámenes. En el colegio, en el instituto, en la universidad... Todo el mundo, pero nadie nunca acaba por acostumbrarse: todos los temen, de una forma u otra. Unos con insomnio los días -o incluso meses- que preceden al susodicho, otros con sudores fríos los minutos antes; unos con tembleques en cualquier parte del cuerpo, otros con ataques involuntarios de habla continuada y frenética; unos con ojeras de tanto repasar los apuntes, otros con agujetas en las manos de la barbacoa que organizó el día de antes (me refiero a las chuletas); en fin, hay mil formas de padecerlos, pero todos los sufrimos aunque nos mentalizamos de que es una simple prueba, un simple examen, uno de tantos.

Sin embargo, poca gente advierte que, si bien no seremos estudiantes eternamente, sí estamos sujetos a exámenes continuados, de los cuales el resultado no responde a una relación directa con el tiempo dedicado al estudio; sino más bien de nuestra capacidad de supervivencia, de salir airosos de un problema común y diario: la vida. Esto sí que es duro, esto sí que da miedo. Te levantas y nunca sabes a qué extraña situación tendrás que hacer frente hoy: quizá te cruces al vecino del quinto y te critique por el volumen de la música del día anterior; o tal vez tengas que pelear en plena calle con un chaval que intenta atracarte; o igual te toca hacer un sprint (digno del primer premio en las Olimpiadas) bajo una lluvia de aguacero porque el autobús acaba de llegar a la parada y tú te encuentras en la otra esquina; es posible que tengas que decidir si ese piso que has visitado hoy es lo que buscas o si este es el trabajo que necesitas; puede ser que te cruces con alguien misterioso que te sonríe amablemente; o quizá hoy alguien te ponen en un compromiso con una pregunta a la que no hallas respuesta; tal vez ha llegado el día de decir adiós a esa persona que tanto quieres, o de intentar solucionar las cosas con ese viejo amigo... Es un examen continuo, con cientos de alternativas, ninguna incorrecta ni tampoco correcta. Pero a pesar de todo, me gusta saber que hoy no será igual que ayer, ni mucho menos que mañana. Hoy es un día diferente y las cosas pueden cambiar, porque quizá mañana tu "examen" te salga perfecto y acabes el día con una sonrisa de oreja a oreja; y aunque no sea así, tienes 365 oportunidades cada año. Merece la pena intentarlo, no te dejes nada en el tintero, no des nada por sentado.

...Yo decido cada día cuál es mi destino,
depende de qué alternativa elija *

miércoles, 30 de septiembre de 2009

Elige tu final feliz


"Cada película que vemos, cada historia que nos cuentan, nos pide que creamos en ellas. Elegir el final de la historia: la declaración de amor inesperada, la excepción a la regla. Pero a veces estamos tan obsesionadas en encontrar nuestro final feliz que nos olvidamos de leer las señales; las que diferencian a los que nos quieren, de los que no, a los que se quedarán, de los que se irán. Y es posible que ese final feliz no incluya al hombre ideal. Recomponiéndote y volviendo a empezar, liberándote para algo mejor que puede haber en tu futuro. Puede que el final feliz sea simplemente pasar página. O puede que el final feliz sea este, saber que a pesar de todas las llamadas no devueltas, de todos los desengaños, las meteduras de pata y las señales malinterpretadas, a pesar de todo el dolor y el bochorno, nunca perdiste las esperanzas."
Extraído de la película ¿Qué les pasa a los hombres?

domingo, 27 de septiembre de 2009

Pequeños detalles...

En otoño, el característico ruido de las hojas secas al chafarlas;
En invierno, el aroma a leña quemada;
En primavera, oler las plantas de lavanda;
En verano, hundir los pies en la orilla de la playa;
En los días soleados, mojarme cuando llueve;
En los días fríos, escuchar las tormentas desde casa mientras veo una película en pijama;
En los días de viento, que el aire me aparte hacia atrás el pelo de la cara;
En los viajes largos, apostar sobre qué gota atravesará antes el parabrisas o sobre cuántos mosquitos se estamparán en el mismo;
En las fechas señaladas, abrir los regalos sin romper el papel y observar la cara de desesperación de los presentes;
En navidad, admirar la cara de felicidad e inocencia de los más pequeños;
En cualquier momento, las reuniones familiares, el olor de un cigarrillo recién encendido, los pueblos perdidos en medio de la nada, quedarme dentro del coche mientras este pasa por el túnel de lavado, encender la radio y que suene esa canción que lleva rondándome la cabeza varios días, las visitas inesperadas, despetarme por la noche y darme cuenta de que quedan horas para que suene el despertador, los susurros de las personas cuando intentan (inútilmente) no despertarme...



Son esos pequeños detalles de la vida que me hacen feliz *

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Corazón averiado en construcción

Estoy vacía de ideas, de inspiración, de sentimientos que contar... Creo que el kit de la cuestión viene siendo que tengo el corazón averiado, en proceso de construcción, de ahí que todo lo que venga a mi cabeza para terminar en la punta de mis dedos marcando las teclas del ordenador sean cosas de un pasado mejor; cosas que me hacen daño al recordarlas.


Pronto estará arreglado y tendré ganas de gritarle al mundo lo que siento, pero hoy no me siento con ganas. No porque esté mal, sino simplemente, como he dicho, porque no tengo nada que contar...






PD. El viaje por Granada muy bien, a quien no haya visitado esta bonita ciudad se lo recomiendo. Claro que si no me hubiese estado recordando mi amiga minuto tras minuto lo muuuuucho que echaba de menos a su novio, si no hubiese estado hablando con él cada hora de lo mismo, si no le hubiese importado más lo que él estaba haciendo en ese momento que disfrutar del viaje y de sus amigas... seguramente yo habría conseguido no acordarme de mi príncipe rana, aquel que se fue. ¿Sabes? yo también le echaba de menos, a mí también todo me recordaba a él, ¿y qué? ¿acaso te interesa? ¿acaso siquiera hs preguntado qué tal estoy? No. Y recuerda, tú tienes alguien ahí que siente lo mismo por ti, yo no. Yo encima de aguantar vuestras tonterías de enamorados -al nivel extremo de las cuales espero no llegar nunca en una relación, me resulta tan vomitivo, tan agobiante, tan... arg! - yo encima tengo que comerme los mocos cuando llegue a casa. Bendita amistad...

lunes, 14 de septiembre de 2009

Viajando

Hace unos días estaba contenta por mi manera de afrontar las cosas y me sentía extrañamente bien, pero anoche no paré de dar vueltas en la cama y de pensar. Creo que mi cabeza empieza a asimilar las cosas, a ver la realidad, y las pocas esperanzas que tenía de que reflexionase se desvanecen. Sí, le sigo pensando, le sigo echando de menos, quiero verle, quiero abrazarle, quiero tener su presencia, quiero que esté a mi lado, quiero que las horas vuelen mientras hablamos de nuestras cosas; pero son cosas que hoy no son posibles... en fin... hoy estoy nostálgica, serán las hormonas o el tiempo.

Pero esta noche cojo el tren y me marcho de viaje con mis "casi" hermanas -la única cosa que nos impide serlo es que no tenemos la misma sangre- hacia el sur, concretamente pa Granà, así que supongo que me olvidaré de toda esta historia por un tiempo. Es uno de los destinos que teníamos pendientes y hoy empieza nuestra aventura, ¡al fin las cuatro!

sábado, 12 de septiembre de 2009

Extrañamente bien...

Han pasado muchas cosas en este último mes y parece ser que al final el tiempo ha puesto a cada uno en su lugar y yo salí perdiendo; ¿o quizá no?
Independientemente, sigo sin arrepentirme de nada porque de todo se aprende y yo ya aprendí a levantarme y a sonreirle al mundo aunque me de una patada detrás de otra. Soy mucho más fuerte de lo que imaginaba, de nada sirve llorar, y realmente me sorprende haberlo conseguido sin derramar ni una lágrima, conservando la calma y la paciencia hasta el final.

Y aunque me duele haber perdido un amigo, cosa que yo no decidí, estoy contenta. Sí, soy feliz (aunque me falte alguien) y hoy voy a disfrutar de mis amigos, de mi familia, de mí misma... ¡¡Hoy voy a salir a comerme el mundo!!

El caso es que no estoy tan mal, me siento extrañamente bien.




...I gotta feeling that tonight's gonna be a good night *

miércoles, 9 de septiembre de 2009

(Des)inspirada

Visto que mi inspiración se ha esfumado, y únicamente vienen a mi mente canciones y más canciones con las que me siento de algún modo identificada, he decidido compartir algunas de ellas:



Los tesoros escondidos [Huecco]



"Duele llorar cristales cuando se congela el agua de los lagrimales. Y tú que siempre presumiste de vivir la carne en carnavales, fiestas y bacanales. Es hora ya de barajar el naipe de las verdades, de las verdades [...] Duele, son cosas normales"


Don't bother [Shakira]



"She's just far better than me, hey hey. So don't bother, I won't die of deception. I promise you won't ever see me cry, don't feel sorry"


Sonrisas de papel [La Sonrisa de Julia]



"Recorriendo este camino junto a ti se me ha hecho corto,si algún día no estás conmigo, seguiré el camino solo [...] Pero no existen heridas que me impidan sonreir"


Tu oportunidad [Taxi]





"No hay nada imposible para quien sabe esperar, no importa si te has caído vuelve a levantar, de pronto la vida brinda una oportunidad, tu oportunidad"

domingo, 6 de septiembre de 2009

Liberada...

Aunque duela,
no voy parar de caminar;

aunque me hayas cortado las alas,
no voy a dejar de volar;


aunque ya no me quieras en tu vida,
no voy a llorar;

aunque todo fuera una mentira,
sé que dentro de un tiempo te puedo perdonar;

aunque no lo advirtieses,
yo también tenía corazón;

aunque te lo prestase y me lo devolvieses hecho pedazos,
yo lo enmendaré y sonreiré por no habértelo regalado :)






...Ahora más que nunca necesito respirar aire fresco*





sábado, 5 de septiembre de 2009

Érase una vez...

Ocurrió hace mucho tiempo en un lugar muy lejano, había una jovenzuela llamada Olivia que nunca había conocido la felicidad. Caminaba por el bosque, como tantas otras veces, pensando en sus cosas cuando de repente un ser extraño se interpuso en su camino; al principio se alegró de conocerle -al fin alguien simpático y amable le prestaba atención- y pronto hicieron muy buenas migas. Peri (que así se llamaba aquel bicho) parecía ser un buen tipo y la chica no dudó en darle toda su confianza.


Pasaron unos meses y la confianza iba en aumento: las tardes de confidencias, los consejos, los gestos de cariño, etc. pero ella no quería encapricharse, sabía que Peri era inalcanzable para ella porque Rosanna ocupaba su corazón durante muchos años. Sin saberlo, fue creciendo un amor del que ella no se daría cuenta hasta verano, era incapaz de entender su corazón... De repente, sin esperarlo, una noche ocurrió algo. Quizá se alinearon los planetas, quizá los Dioses se apiadaron de ellos, quién lo sabe, el caso es que el amor llamó a sus puertas y aquel ser extraño del que se enamoró Olivia resultó ser un apuesto príncipe, su príncipe.


Todo era perfecto, ambos se querían, se respiraba en el ambiente el amor y la atracción que el uno sentía sobre el otro. ¿Así que esto es la felicidad? se alegraba la joven. Sin embargo, la buena racha duró mucho menos de lo que a ella le habría gustado. El príncipe Peri decidió que aquello estaba yendo demasiado rápido y se asustó tanto que decidió apartarse un tiempo de Olivia, un tiempo que ella interpretó como algo necesario pero duro, muy duro. Bastaron cinco días para que Peri regresase a sus brazos seguro de lo que había hecho: entre Rosanna y él ya no había nada, solo quedaban las cenizas de un amor que se gastó y le quemó. Fue entonces cuando la relación alcanzó un punto extremo, Olivia y Peri eran dos enamorados que pretendían estar juntos durante mucho tiempo. Sabían que aquello no iba a ser fácil, pues Rosanna no se iba a rendir y movería tierro y cielo para recuperar a su amado. Olivia, que era demasiado inocente, se alegró de que su príncipe mantuviese una relación de amistad con Rosanna, de hecho, así se lo aconsejó ella misma... Todo seguía siendo todavía más pefecto que al principio, un jardín de rosas sin espinas, un cielo de nubes de algodón. "Soy super feliz cuando estoy contigo, me gustas mucho" le dijo una noche Peri al oído. Podían estar horas y horas y horas juntos, tirados en medio del bosque, hablando abrazados que nunca se cansaban el uno del otro. De vez en cuando Olivia pensaba que algún día despertaría de aquel idílico sueño y pronto él la tranquilizaba asegurándole que no, que de lo único que se arrepentía era de no haberse dado cuenta antes de lo que pasaba.


Pero todo esto era demasiado bonito para ser cierto, un buen día, sin ton ni son, el príncipe empezó a estar inseguro, de nuevo necesitaba un tiempo para estar solo y pensar todo lo que le estaba sucediendo ¿por qué? solo él lo sabía. Olivia, comprensiva como ninguna, le concedió su tiempo y su espacio, esperando en la más mísera soledad una explicación convincente. Confiaba en él, así que no había nada que temer, simplemente aquello estaba yendo demasiado rápido y él estaba un poco agobiado, sí, seguro que era eso.


Pasaron dos días, tres, cuatro y él no daba señales de vida. Cinco días... y su príncipe todavía no sabía cuánto más duraría la espera pues necesitaba tener todo claro en su cabeza para dar el paso; ella no podía más, estaba a punto de estallar. ¿Todo aquello había sido una gran mentira? Imposible -se autoconvencía- seguro que tiene una explicación y queda menos para saberlo, aguanta. Finalmente, el sexto día Olivia se enteró de rebote, a través de terceras personas que no estaban al tanto de su relación con Peri, que este había vuelto con Rosanna.


Esto sucedió no hace mucho tiempo en un lugar no tan lejano y todavía hoy aquella joven está esperando que Peri, aquel príncipe que resultó ser un gusano rastrero, le de la "gran" noticia y le explique todo lo sucedido... ¿Cómo pudo ser tan cobarde? ¿cómo pudo mentirle de esa manera? ¿cómo pudo cambiar tanto de la noche a la mañana? ¿cómo pudo ser tan...?












...Lo que más me duele son tus mentiras, me has traicionado.

lunes, 31 de agosto de 2009

Simplemente...

No quiero darle más vueltas al asunto porque me va a estallar la cabeza. Estos días estoy intentando, a diferencia de la otra vez, no pararme a pensar. Hago mil cosas, quedo con unos, quedo con otros y estoy sola lo justo. Aún así se me hace duro, te echo un montón de menos.
Me pregunto si todo fue una gran mentira, o si por el contrario este es solo un mal principio; ya comentamos hace unos días que no iba a ser nada fácil.
Independientemente, me niego a restregarme en mi propia mierda. Solo me permito unos minutos de bajón al día, pocas miradas al móvil esperando tu llamada (realmente, más de las que desearía) y alguna que otra visita al correo para comprobar que, efectivamente, todavía es demasiado pronto para saber de ti. No volveré a escribir en el blog hasta que todo esté solucionado, al menos no sobre ti, porque solo pensarte me hace daño... Confío en ti, siempre lo he hecho, así que no debo rallarme más. Simplemente necesitas un tiempo para asentar las ideas y estabilizarte, eso es todo.



...No importa si te has caído vuelve a levantar, quizá ese momento está a punto de llegar: tu oportunidad *

sábado, 29 de agosto de 2009

Es de esos días de verano...

Sin besos de despedida y sin palabras bonitas, un cielo de nubes negras cubría el último adiós. Fue sentir de repente tu ausencia, como un eclipse de sol, ¿por qué no vas a mi vera?
Si pienso en ti siento que esta vida no es justa, si pienso en ti y en la luz de esa mirada tuya, esa mirada tuya... Es de esos días de verano, vivo en el reino de soledad.
...Nunca vas a saber cómo me siento,
nadie va a adivinar cómo te recuerdo.






[No me gusta nada Amaral, pero en estos momentos creo que esta canción define mi estado. Sigo viva, con la cabeza bien alta, pero con un nudo en el estómago que no es ni normal...]

viernes, 28 de agosto de 2009

Sueño convertido en pesadilla...

¿Otra vez? No sé si seré capaz de aguantar otra cura de desintoxicación de las tuyas, esas tan radicales... Necesitas aclarar tus pensamientos, pensé que ya estaba solucionado pero veo que no. De acuerdo, ya te dije que no tengo prisa por esperarte. Siento haberme convertido en parte de tu problema y no sabes cuánto deseo que tu vida se estabilice, tanto vaivén no es bueno para nadie.


¿Lo ves? mis miedos se han hecho realidad, eso qúe tú decías que no llegaría ha llegado: he despertado. ¡Y vaya forma de hacerlo! Jarrito de agua fría cuando creía que mejor iban las cosas. Bastó una llamada de ella para que tu cara cambiase, para que tu cabeza comenzara a liarse. Ella ha sabido jugar bien sus cartas, yo me niego a luchar de esa forma, me niego a acapararte, a controlarte. Yo te daré el espacio que pides a gritos, un tiempo para que lo dediques SOLO A TI, no voy a estar llamándote a toda hora ni nada por el estilo, por mucho que necesite escuchar tu voz. Sé que me arriesgo a que me olvides, pero solo así sabré que si vuelves es por ti y no por mis artimañas de bruja.





Quiero salir de esta pesadilla de una vez. Sé que una vez te dije que no me despertases, pero ahora por favor no tardes en acostarte y contarme el cuento donde todo acaba bien...

Nadie dijo que fuera fácil...

No, nadie lo dijo. Pero tampoco que fuese tan complicado...

Estoy tranquila, confío en ti; pero no en ella. Me pongo en su lugar y sé que no pararía de luchar hasta que las caídas me trastocasen la cabeza y mi locura consiguiera olvidarte. Ahora mismo me preocupas tú, te lo callas todo y te lo veo en la cara, no me mientas diciendo que no pasa nada. No sé si hoy podré dormir, pero no te preocupes ni por mí, ni por ella, ni por nadie más que no seas TÚ. Creo que va siendo hora de que empieces a pensar EN ti, en ocasiones es bueno ser un poco egoista...

Sé que no va a ser fácil, es más, intuyo que va a ser muy difícil; pero estoy aquí para ayudarte siempre que lo necesites.

















...auuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu

lunes, 24 de agosto de 2009

Un ratito a pie y otro caminando...

- Tengo miedo de perderte...


- Tranquila, nuestras ideas están encaminadas hacia el mismo sitio, pero tú llevas la velocidad de un Ferrari y yo la de un 600



Fue tras esta conversación cuando decidieron bajar el ritmo que llevaban porque él se estaba agotando y ella volaba demasiado alto. Empezaron entonces un largo camino...



Caminaban lentamente, paso a paso: un pie delante, luego el otro, y así sucesivamente con mucho cuidado de no tropezar con ninguna piedra para no chocar de bruces contra el suelo.



Caminaban lentamente, uno al lado del otro dispuestos a tenderse la mano para ayudarse en cualquier momento.


Caminaban lentamente, saboreando cada instante, que no había prisa por llegar a la meta. Lo importante, lo que realmente habían de disfrutar era del paisaje.


Y así, paso a paso, mano a mano, con pies de plomo pero con las ideas muy claras consiguieron su objetivo; recuerda, la felicidad se encuentra a la vuelta de la esquina

domingo, 23 de agosto de 2009

Smila, misterio en la nieve

¿No te suena la frase: "Estaba tan borracho que no sabía lo que hacía"? Por eso haré esto antes de beber nada...
*Quiero darme de alta en tu vida, para siempre*

miércoles, 19 de agosto de 2009

Viviendo un sueño...

¿Un final feliz? ¿para mí? Todavía no puedo creer que esto me esté pasando, no estoy acostumbrada a que la vida me sonría. Tengo miedo, lo reconozco, porque piso terreno desconocido; pero contigo todo parece tan fácil.
No tengo palabras suficientes para agradecerte todo... me quedo con la canción que me acabas de dar a conocer.






[...]


Me quiero morir si veo tristeza en tu sonrisa de niña,

dependo de ti si estás mal puede que nunca sonría.

¿Qué es lo que has visto tú en mí,
que me regalas tu verdad y tu cielo,
que en esta vida ya no quiero otros besos
y cada día tu me das tu total?


Y pienso, que si no existes yo me muero,
que en mi cabeza había un sueño,
¡y que se ha hecho realidad!


Y quiero, contarle al mundo entero,
que tu vida es lo que quiero
y que tú eres mi mitad.


Y voy a darte mi alma y mi verdad,
borrar tus heridas y pensar
que tú eres la suerte de mi vida.


Y voy a morirme y a luchar,
a llorar de alegría,
quererte aún más,
porque tú eres la suerte de mi vida.

[...]




lunes, 17 de agosto de 2009

Querido amigo,

Esta será mi última carta, mi terapia particular también ha finalizado. Eres un paciente de primera, tu cura de desintoxicación ha terminado mucho antes de lo que esperaba. Parece ser que tu pequeña cabecita ha aclarado sus ideas y has decidido dar un gran paso en tu vida: dejar atrás aquello que no te llenaba y aquello que, me lo vas a permitir, no te cuidaba ni te trataba como mereces.

Te admiro, supongo que es difícil dejar una relación de tantos años... Sé que, aunque hayamos decidido darnos una oportunidad, necesitas tu tiempo. No temas, no tengo ninguna prisa. Quiero vivir cada momento, saborearlo, disrutarlo. Quiero mirarte hasta que las ojeras me lleguen por los tobillos. Quiero estar tumbada junto a ti y hablar durante horas y horas. Quiero abrazarte y apretujarte. Quiero besarte. Quiero estar contigo. Quiero que tú estés conmigo. Pero con calma, no te preocupes, muy poquito a poco.

Ahora estoy en casa, todavía no me creo que esto me esté pasando a mí. ¿Tú y yo, conociéndonos? ¡Soy tan feliz! ¿Sabes las veces que he fantaseado con esto? Pero siempre me concienciaba de que nunca te "tendría"; no sé qué es lo que has visto en mí (bueno sí, mi mirada inocente y pícara a la vez, como dijiste una vez) pero te puedo asegurar que ahora que te "tengo" no voy a dejarte escapar tan fácilmente.

Quizá te parecerá una tontería pero me siento tan unida a ti, ¿no notas esa extraña sensación?

Ahora tengo que vivir este sueño, contigo...
Llévame esta noche a San Fernando,
iremos un ratito a pie y otro caminando.
Súbeme al Monte de las Siete Verdades
o enséñame a besar como tú sólo sabes.

sábado, 15 de agosto de 2009

Querido amigo,


He de confesar que estos días he batido el récord de número de veces de comprobar en el móvil que, efectivamente, no tenía ni un mensaje tuyo. Y hoy... ¡¡¡¡al fin he sabido de ti!!!! :)


Me dices que todo va bien que estás más relajado y con las ideas claras... eso me tranquiliza y me hace sentir bien. Aunque eso de que estés "disfrutando una falsa felicidad" no lo termino de entender; pero bueno, mañana me lo explicas todo mejor.


Preguntas si estoy rallada. Ya sabes la respuesta, aunque bueno, más que eso estaba preocupada por ti, porque no sabía cómo estabas y, de todos modos, sabía que no podría hacer nada por aliviarte; claro que escribirte una carta diaria contándote todas esas cosas que no puedo decirte es propio de alguien con cierto grado de locura. Vale, aceptamos barco como animal de compañía...


¿Sabes? Te echaba de menos, echaba en falta esta extraña sensación de bienestar al hablar contigo. Estoy contenta, me has dado la alegría del día; espero que mañana no me tires otro jarro de agua fría cuando nos veamos.




Temblando
con los ojos cerrados
el cielo esta nublado
y a lo lejos tú
hablando
de lo que te ha pasado
intentando ordenar palabras
para no hacerme
tanto daño
tanto daño
y yo, sigo temblando.


viernes, 14 de agosto de 2009

Querido amigo,

Ya me han dicho qué es lo que me produce esa tos tan ronca que llevo arrastrando desde Noviembre - no, no te tengo alergia - es simplemente que no se me han desarrollado los senos (ahórrate la gracia, me refiero a los senos nasales); pero no es nada importante, solo que es posible que me den jaquecas (sí, soy una envidiosa de tus problemas de migrañas), que tenga congestión, tos, etc. y posiblemente también es la causa de que me trague media piscina por la nariz cada vez... ¿Cómo evitarlo? Tomando medidas como no andar descalza, no salir con el pelo húmedo a la calle, no comer cosas frías... ¡Nada importante!

Respecto a estas cartas, empiezo a pensar que tienes razón: estoy como una cabra. Pero ahora que he empezado me niego a dejar las cosas a medias, como acostumbro a hacer últimamente; me he prometido a mí misma qe te escribiré una carta diaria, y así será. Sé que quizá lo más adecuado es pasar página y olvidarte, ¿pero sabes qué? que estoy harta de hacer siempre lo mismo y esta vez no me daré por vencida. Al menos no hasta que termine tu cura de desintoxicación de mí... Solo entonces, con todas las cartas que NO te habré mandado, estará llena esta página de mi vida y sabré(mos) hacia dónde caminar.


I promised myself
I promised I'd wait for you

jueves, 13 de agosto de 2009

Querido amigo,

Anoche el Lorenzo pilló un sofoco de infarto y sus lágrimas se vieron a años luz de su hogar, soy testigo de ello. Tumbada en la arena no pude evitar recordarte a mi lado mirando todos los osos perezosos que gobiernan en el cielo por las noches... De repente, suena el móvil. He de reconocer que me alegró tener noticias tuyas, aunque fuese un mísero mensaje de "solo información" para avisarme de que podía acudir tranquilamente a la comida de hoy porque tú no podías ir; hubiese preferido que vinieses y juzgar por mí misma que estás mejor, pero supongo que aún estarás de vacaciones con ella y, al fin y al cabo, esto forma parte de nuestra cura de desintoxicación.

Por mi parte, la vida sigue. Hoy el día no ha empezado muy bien que digamos, odio estar en casa en vacaciones con mis padres porque parece que todo lo que haga (o no haga) está mal hecho; si salgo porque salgo, si no salgo porque no salgo... en fin, no estoy acostumbrada a recibir órdenes, se me da mejor el darlas. Pero bueno, menos mal que se les pasa rápido y pronto estamos de bromas, simplemente son pequeños detalles que me sacan de quicio, creo que esta es una de las razones por las que me gusta desaparecer en verano.

La comida en el chalet de B ha estado bastante bien, aunque más que comida ha sido merienda (por la hora, no por la cantidad de comida). ¡Qué relax no depender de horarios de cocina ni de actividades ni nada de nada!, al fin apesto a vacaciones...
Y yo
No tengo armas para enfrentarte
Pongo mis manos, manos al aire
Sólo me importa amarte
En cuerpo y alma como era ayer
Tú que perdiste el control
Te dejaste llevar
Por la inseguridad
Yo que te he visto crecer
Me puedo imaginar
Que todo cambiará

miércoles, 12 de agosto de 2009

Querido amigo,


Poco a poco voy entendiendo que fue la opción más adecuada, pero todavía duele tu ausencia. Me acuerdo de todo lo que hemos pasado juntos, de las bromas, de las miradas, de las caricias, de los arrebatos pasionales, de los susurros, de las noches a tu lado, de los besos robados al despertar, de nuestras largas charlas nocturnas, de los secretos... me acuerdo de todo, menos de olvidarte. Te echo de menos, y no sabes cuánto. Aunque quizá eche de menos aquello que me hacías sentir, pero tú vas unido a eso... no sé tal vez esté confundida, pero el tiempo nos ayudará a los dos.


Tengo miedo de perderte, de no verte más; pase lo que pase me gustaría poder contar contigo y mantener esta confianza que nos ha unido. Sé que será complicado, pero me has demostrado que no hay nada imposible...


No matter what I do
All I think about is you
Even when Im with my Boo
Boy, you know Im crazy over you

martes, 11 de agosto de 2009

Querido amigo,

Hace tan solo tres días que empezaste esta cura de desintoxicación radical y te echo de menos, así que hoy empieza mi terapia particular. Yo no puedo estar un mes sin hablarte, ayer te vi conectado pero no te dije nada porque es lo que tú has decidido y yo te apoyo, hagas lo que hagas; pero se me hace cuesta arriba todo, y más aún sabiendo que no “puedo” hablarte... ¿a ti no te pasa? Así que he decidido escribirte una carta cada día, contándote lo que te diría en circunstancias normales y quién sabe, igual algún día sabes todo aquello que hoy por hoy mis labios callan y solo mis dedos escriben...

Llevo unos días que no soy yo, solo hago que arrastrarme de un lado a otro, solo me apetece dormir y que pasen estos días de mierda rápido. El sábado, cuando quedamos por última vez fue todo muy raro, no me gustó nada verte así. La impotencia de no poder hacer nada para sacarte una sonrisa me hacía sentir peor de lo que ya se siente una sabiendo que se ha metido donde no la llaman. Solo hago que incordiar en tu vida, pero de verdad que esto no lo tenía ni pensado y solo me arrepiento de haberte rallado hasta este punto. Lo cierto es que no me esperaba esta reacción, esperaba que todo quedase allí y punto, que al salir todo volviese a la normalidad. Eso es justo lo que tú dijiste la primera noche: “pase lo que pase, no ha pasado nada...”. Reconozco que también lo habría pasado mal, ¿para qué engañarnos? Pero esto es peor; el simple hecho de replantearte tu relación, el decirme que conmigo has sentido cosas que hacía mucho no sentías me ha llevado a este estado de shock...


Lloré mucho aquella noche y sé que tú también lo hiciste, aunque prometiste que no lo harías esas cosas no se pueden controlar. Odio las despedidas y aquello era una en toda regla, no me digas que no. Quiero verte sonreír, quiero verte feliz. Quiero que pronto llegues a tu corazón y lo escuches atentamente y cojas tu camino; quizá no es ella, quizá no soy yo, pero tienes que llegar a él cuanto antes, hazlo por ti.


Pensándolo bien, esto también me irá bien a mí. He sentido demasiadas cosas en muy poco tiempo, y todos sabemos que aquello es un mundo paralelo donde todo se intensifica más. Supongo que, al fin y al cabo, esto es lo mejor par los dos.

Ahora estarás de vacaciones con ella, así que espero que no me eches mucho de menos, lo cual significará que el tiempo está poniendo a cada cual en su sitio. Mientras, yo te espero aquí, sentada frente al ordenador, escuchando a Manolo García...



Nana del marinero, nudo de antojos,
que nadie te amará tanto como yo.
Si ahora pudiese estar mirando tus ojos,
¿iba a estar escribiendo aquí esta canción?
Y esperaré, y si no vuelves,
bajo el olivo me quedaré dormido,
y dormiré entre libros prohibidos,
al olvido de un tiempo que añoro,
el que viví contigo.

viernes, 7 de agosto de 2009

Gira la noria...

Las vueltas que da la vida...

Sucedió que no era tan importante para mí. Él no supo tratarme como debía y decidió echar la vista atrás, como de costumbre, y regresar a su perdición. Realmente me parece muy triste que alguien pueda controlarte y utilizarte de esa forma; y mucho peor es saber que te lo están haciendo y seguir ahí como un perrito lazarillo.

Por suerte, yo tomé justo el camino contrario: decidí mirar a mi alrededor y dejarme llevar, al fin y al cabo el futuro lo construimos nosotros día a día. Sé que no debía, sé que va en contra de mis principios, sé que juamos con fuego y padecimos quemaduras de tercer grado; pero también sé que llegó en el momento exacto. Justo cuando lo necesitaba estallamos en una caricia, un beso, una mirada, un abrazo... y lo peor de todo (o lo mejor) es que no me arrepiento de nada, es más, sería capaz de equivocarme una y otra vez.

Llevo unas horas fuera de la burbuja, alejada de nuestro mundo paralelo, donde nadie que no haya estado ahí dentro puede entender lo que se siente ni lo que se magifican los sentimientos. Llevo unas horas y ya le echo de menos... pero ahora todo va a ser como antes, lo supe desde el primer beso: pase lo que pase, no ha pasado nada.