miércoles, 30 de septiembre de 2009

Elige tu final feliz


"Cada película que vemos, cada historia que nos cuentan, nos pide que creamos en ellas. Elegir el final de la historia: la declaración de amor inesperada, la excepción a la regla. Pero a veces estamos tan obsesionadas en encontrar nuestro final feliz que nos olvidamos de leer las señales; las que diferencian a los que nos quieren, de los que no, a los que se quedarán, de los que se irán. Y es posible que ese final feliz no incluya al hombre ideal. Recomponiéndote y volviendo a empezar, liberándote para algo mejor que puede haber en tu futuro. Puede que el final feliz sea simplemente pasar página. O puede que el final feliz sea este, saber que a pesar de todas las llamadas no devueltas, de todos los desengaños, las meteduras de pata y las señales malinterpretadas, a pesar de todo el dolor y el bochorno, nunca perdiste las esperanzas."
Extraído de la película ¿Qué les pasa a los hombres?

domingo, 27 de septiembre de 2009

Pequeños detalles...

En otoño, el característico ruido de las hojas secas al chafarlas;
En invierno, el aroma a leña quemada;
En primavera, oler las plantas de lavanda;
En verano, hundir los pies en la orilla de la playa;
En los días soleados, mojarme cuando llueve;
En los días fríos, escuchar las tormentas desde casa mientras veo una película en pijama;
En los días de viento, que el aire me aparte hacia atrás el pelo de la cara;
En los viajes largos, apostar sobre qué gota atravesará antes el parabrisas o sobre cuántos mosquitos se estamparán en el mismo;
En las fechas señaladas, abrir los regalos sin romper el papel y observar la cara de desesperación de los presentes;
En navidad, admirar la cara de felicidad e inocencia de los más pequeños;
En cualquier momento, las reuniones familiares, el olor de un cigarrillo recién encendido, los pueblos perdidos en medio de la nada, quedarme dentro del coche mientras este pasa por el túnel de lavado, encender la radio y que suene esa canción que lleva rondándome la cabeza varios días, las visitas inesperadas, despetarme por la noche y darme cuenta de que quedan horas para que suene el despertador, los susurros de las personas cuando intentan (inútilmente) no despertarme...



Son esos pequeños detalles de la vida que me hacen feliz *

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Corazón averiado en construcción

Estoy vacía de ideas, de inspiración, de sentimientos que contar... Creo que el kit de la cuestión viene siendo que tengo el corazón averiado, en proceso de construcción, de ahí que todo lo que venga a mi cabeza para terminar en la punta de mis dedos marcando las teclas del ordenador sean cosas de un pasado mejor; cosas que me hacen daño al recordarlas.


Pronto estará arreglado y tendré ganas de gritarle al mundo lo que siento, pero hoy no me siento con ganas. No porque esté mal, sino simplemente, como he dicho, porque no tengo nada que contar...






PD. El viaje por Granada muy bien, a quien no haya visitado esta bonita ciudad se lo recomiendo. Claro que si no me hubiese estado recordando mi amiga minuto tras minuto lo muuuuucho que echaba de menos a su novio, si no hubiese estado hablando con él cada hora de lo mismo, si no le hubiese importado más lo que él estaba haciendo en ese momento que disfrutar del viaje y de sus amigas... seguramente yo habría conseguido no acordarme de mi príncipe rana, aquel que se fue. ¿Sabes? yo también le echaba de menos, a mí también todo me recordaba a él, ¿y qué? ¿acaso te interesa? ¿acaso siquiera hs preguntado qué tal estoy? No. Y recuerda, tú tienes alguien ahí que siente lo mismo por ti, yo no. Yo encima de aguantar vuestras tonterías de enamorados -al nivel extremo de las cuales espero no llegar nunca en una relación, me resulta tan vomitivo, tan agobiante, tan... arg! - yo encima tengo que comerme los mocos cuando llegue a casa. Bendita amistad...

lunes, 14 de septiembre de 2009

Viajando

Hace unos días estaba contenta por mi manera de afrontar las cosas y me sentía extrañamente bien, pero anoche no paré de dar vueltas en la cama y de pensar. Creo que mi cabeza empieza a asimilar las cosas, a ver la realidad, y las pocas esperanzas que tenía de que reflexionase se desvanecen. Sí, le sigo pensando, le sigo echando de menos, quiero verle, quiero abrazarle, quiero tener su presencia, quiero que esté a mi lado, quiero que las horas vuelen mientras hablamos de nuestras cosas; pero son cosas que hoy no son posibles... en fin... hoy estoy nostálgica, serán las hormonas o el tiempo.

Pero esta noche cojo el tren y me marcho de viaje con mis "casi" hermanas -la única cosa que nos impide serlo es que no tenemos la misma sangre- hacia el sur, concretamente pa Granà, así que supongo que me olvidaré de toda esta historia por un tiempo. Es uno de los destinos que teníamos pendientes y hoy empieza nuestra aventura, ¡al fin las cuatro!

sábado, 12 de septiembre de 2009

Extrañamente bien...

Han pasado muchas cosas en este último mes y parece ser que al final el tiempo ha puesto a cada uno en su lugar y yo salí perdiendo; ¿o quizá no?
Independientemente, sigo sin arrepentirme de nada porque de todo se aprende y yo ya aprendí a levantarme y a sonreirle al mundo aunque me de una patada detrás de otra. Soy mucho más fuerte de lo que imaginaba, de nada sirve llorar, y realmente me sorprende haberlo conseguido sin derramar ni una lágrima, conservando la calma y la paciencia hasta el final.

Y aunque me duele haber perdido un amigo, cosa que yo no decidí, estoy contenta. Sí, soy feliz (aunque me falte alguien) y hoy voy a disfrutar de mis amigos, de mi familia, de mí misma... ¡¡Hoy voy a salir a comerme el mundo!!

El caso es que no estoy tan mal, me siento extrañamente bien.




...I gotta feeling that tonight's gonna be a good night *

miércoles, 9 de septiembre de 2009

(Des)inspirada

Visto que mi inspiración se ha esfumado, y únicamente vienen a mi mente canciones y más canciones con las que me siento de algún modo identificada, he decidido compartir algunas de ellas:



Los tesoros escondidos [Huecco]



"Duele llorar cristales cuando se congela el agua de los lagrimales. Y tú que siempre presumiste de vivir la carne en carnavales, fiestas y bacanales. Es hora ya de barajar el naipe de las verdades, de las verdades [...] Duele, son cosas normales"


Don't bother [Shakira]



"She's just far better than me, hey hey. So don't bother, I won't die of deception. I promise you won't ever see me cry, don't feel sorry"


Sonrisas de papel [La Sonrisa de Julia]



"Recorriendo este camino junto a ti se me ha hecho corto,si algún día no estás conmigo, seguiré el camino solo [...] Pero no existen heridas que me impidan sonreir"


Tu oportunidad [Taxi]





"No hay nada imposible para quien sabe esperar, no importa si te has caído vuelve a levantar, de pronto la vida brinda una oportunidad, tu oportunidad"

domingo, 6 de septiembre de 2009

Liberada...

Aunque duela,
no voy parar de caminar;

aunque me hayas cortado las alas,
no voy a dejar de volar;


aunque ya no me quieras en tu vida,
no voy a llorar;

aunque todo fuera una mentira,
sé que dentro de un tiempo te puedo perdonar;

aunque no lo advirtieses,
yo también tenía corazón;

aunque te lo prestase y me lo devolvieses hecho pedazos,
yo lo enmendaré y sonreiré por no habértelo regalado :)






...Ahora más que nunca necesito respirar aire fresco*





sábado, 5 de septiembre de 2009

Érase una vez...

Ocurrió hace mucho tiempo en un lugar muy lejano, había una jovenzuela llamada Olivia que nunca había conocido la felicidad. Caminaba por el bosque, como tantas otras veces, pensando en sus cosas cuando de repente un ser extraño se interpuso en su camino; al principio se alegró de conocerle -al fin alguien simpático y amable le prestaba atención- y pronto hicieron muy buenas migas. Peri (que así se llamaba aquel bicho) parecía ser un buen tipo y la chica no dudó en darle toda su confianza.


Pasaron unos meses y la confianza iba en aumento: las tardes de confidencias, los consejos, los gestos de cariño, etc. pero ella no quería encapricharse, sabía que Peri era inalcanzable para ella porque Rosanna ocupaba su corazón durante muchos años. Sin saberlo, fue creciendo un amor del que ella no se daría cuenta hasta verano, era incapaz de entender su corazón... De repente, sin esperarlo, una noche ocurrió algo. Quizá se alinearon los planetas, quizá los Dioses se apiadaron de ellos, quién lo sabe, el caso es que el amor llamó a sus puertas y aquel ser extraño del que se enamoró Olivia resultó ser un apuesto príncipe, su príncipe.


Todo era perfecto, ambos se querían, se respiraba en el ambiente el amor y la atracción que el uno sentía sobre el otro. ¿Así que esto es la felicidad? se alegraba la joven. Sin embargo, la buena racha duró mucho menos de lo que a ella le habría gustado. El príncipe Peri decidió que aquello estaba yendo demasiado rápido y se asustó tanto que decidió apartarse un tiempo de Olivia, un tiempo que ella interpretó como algo necesario pero duro, muy duro. Bastaron cinco días para que Peri regresase a sus brazos seguro de lo que había hecho: entre Rosanna y él ya no había nada, solo quedaban las cenizas de un amor que se gastó y le quemó. Fue entonces cuando la relación alcanzó un punto extremo, Olivia y Peri eran dos enamorados que pretendían estar juntos durante mucho tiempo. Sabían que aquello no iba a ser fácil, pues Rosanna no se iba a rendir y movería tierro y cielo para recuperar a su amado. Olivia, que era demasiado inocente, se alegró de que su príncipe mantuviese una relación de amistad con Rosanna, de hecho, así se lo aconsejó ella misma... Todo seguía siendo todavía más pefecto que al principio, un jardín de rosas sin espinas, un cielo de nubes de algodón. "Soy super feliz cuando estoy contigo, me gustas mucho" le dijo una noche Peri al oído. Podían estar horas y horas y horas juntos, tirados en medio del bosque, hablando abrazados que nunca se cansaban el uno del otro. De vez en cuando Olivia pensaba que algún día despertaría de aquel idílico sueño y pronto él la tranquilizaba asegurándole que no, que de lo único que se arrepentía era de no haberse dado cuenta antes de lo que pasaba.


Pero todo esto era demasiado bonito para ser cierto, un buen día, sin ton ni son, el príncipe empezó a estar inseguro, de nuevo necesitaba un tiempo para estar solo y pensar todo lo que le estaba sucediendo ¿por qué? solo él lo sabía. Olivia, comprensiva como ninguna, le concedió su tiempo y su espacio, esperando en la más mísera soledad una explicación convincente. Confiaba en él, así que no había nada que temer, simplemente aquello estaba yendo demasiado rápido y él estaba un poco agobiado, sí, seguro que era eso.


Pasaron dos días, tres, cuatro y él no daba señales de vida. Cinco días... y su príncipe todavía no sabía cuánto más duraría la espera pues necesitaba tener todo claro en su cabeza para dar el paso; ella no podía más, estaba a punto de estallar. ¿Todo aquello había sido una gran mentira? Imposible -se autoconvencía- seguro que tiene una explicación y queda menos para saberlo, aguanta. Finalmente, el sexto día Olivia se enteró de rebote, a través de terceras personas que no estaban al tanto de su relación con Peri, que este había vuelto con Rosanna.


Esto sucedió no hace mucho tiempo en un lugar no tan lejano y todavía hoy aquella joven está esperando que Peri, aquel príncipe que resultó ser un gusano rastrero, le de la "gran" noticia y le explique todo lo sucedido... ¿Cómo pudo ser tan cobarde? ¿cómo pudo mentirle de esa manera? ¿cómo pudo cambiar tanto de la noche a la mañana? ¿cómo pudo ser tan...?












...Lo que más me duele son tus mentiras, me has traicionado.